Una peculiaridad que me fascina
de la Bienal de Venecia es el hecho que aún dividan a los artistas por nacionalidades
y cada país participante tenga su pabellón. Creo que esto se debe a que la
Bienal sigue la tradición de lo que eran las grandes exposiciones universales. En Venecia son muy reacios a que las cosas
cambien y se empeñan en seguir las tradiciones, por absurdas que parezcan, y es así como viene funcionando el evento desde hace más de 100 años.
La elección de los artistas recae en las comisiones de cada país, este año la comisión de España,
formada por el curador Octavio Zaya, Chus Martínez y Peio Aguirre, ha seleccionado como representante del pabellón español a Lara Almarcegui.
La obra de esta artista maña
afincada en Róterdam, Holanda, centra su interés en los espacios no usados de
las ciudades y la relación de las personas con ellos. Prácticamente lo que Lara
hace es seleccionar descampados o arquitecturas abandonadas y tratar que la
gente reflexione sobre ellos. Interviene en esos lugares directamente pero sin
tocarlos ni darles una nueva función, simplemente
intenta mostrarlos al público, abrir sus puertas. Técnicamente su trabajo se ha
basado en conseguir los permisos necesarios para que el público los visite, y
hasta para conservarlos tal y como están.
En mi opinión es un trabajo muy
ingenioso, pues es verdad que desde mi propia experiencia ese tipo de lugares
me han provocado diferentes emociones; desde miedo, hasta adrenalina, curiosidad y nostalgia. Quién no se ha sorprendido inventando la historia de algún sitio y los motivos de su
abandono o simplemente su no uso. En ese sentido Lara ha realizado obras interesantes, como editar guías para visitar descampados de varias
ciudades o investigar la historia de cada lugar y contarla al público.
Proyecto Madrid subterráneo |
Aún es pronto para hablar del
proyecto que presentará en Venecia, pero en esta línea la ciudad tiene
muchísimo que ofrecer aunque no lo parezca! Podemos encontrar palacios
deshabitados, islas abandonadas con todo tipo de ruinas y en tierra firme
multitud de zonas industriales en desuso.
No se vosotros pero yo ya estoy
ansiosa por ver lo que Lara presentará en La Bienal de Venecia, el evento más
importante del 2013 para el arte contemporáneo a nivel internacional.
Fuentes:
Una visita turística, por muy interesante o cutre que sea, no es nada más que eso. ¿A qué llamamos arte?. Hemos pasado de que como dice T.Wolfe, las obras de arte sólo sirven para ilustrar textos de Teorías farragosas, a terminar con la obra de arte como tal. Si es teatro, o Karaoke, o un reality; no es una perfomance. Si es un muestrario turístico, no es una obra de arte.Si es un estudio sobre la cantidad de hormigón que se utilizó en Sao Paulo, como hizo esta mujer, es un peñazo sin interés ni para los arquitectos.
ResponderEliminar¿Cuando se acabará el siglo XX y sus memeces?
Precisamente el arte no tiene una definición limitada, ni creo que se necesite limitar, por eso en ciertas ocasiones una visita turística puede considerarse como una pieza artística, como a veces pasa con la publicidad, y también puede pasar, por qué no, con un karaoke o un reality. Puede ser que para algunos el arte sin placer estético sea un peñazo, para mi no es así, el placer estético lo encuentro en los trasfondos de la obra, en los motivos, en lo que me sugiere, etc. En Lara Almarcegui la potencia visual de trabajar con escombros y con espacios en desuso, me parece sublime.
EliminarMuchas gracias por pasar por aquí y comentar Paloma, y no olvides que estamos en el siglo XXI!